Gimnasia llega a la última fecha del torneo como único líder de la Zona B de la Primera Nacional con 60 puntos, dos más que Estudiantes de Caseros y tres por encima de Morón y Estudiantes de Río Cuarto. Con ese escenario, el Lobo depende de sí mismo para meterse en la gran final por el primer ascenso y definirá todo este fin de semana en el Víctor Legrotaglie frente a Defensores de Belgrano.

¿Qué necesita Gimnasia para jugar la final?

El panorama más claro para Gimnasia es ganar: con una victoria sellará su boleto a la definición, sin necesidad de mirar otros resultados. En caso de empatar, necesitarán que Estudiantes de Caseros no sume de a tres en su visita a Mitre de Santiago del Estero.

El escenario más riesgoso es la derrota. Si Gimnasia pierde ante el Dragón, solo clasificará a la final en caso de que ninguno de sus tres perseguidores directos -Estudiantes de Caseros, Morón y Estudiantes de Río Cuarto- logre un triunfo en sus respectivos compromisos.

La ilusión en Mendoza es total: el equipo sabe que está ante una oportunidad histórica. La gran final ya tiene a Deportivo Madryn esperando rival, y el Lobo quiere sumarse para pelear por el primer ascenso luego de la dolorosa derrota ante San Martín de San Juan en la final del 2024.