Final explicado de Incontrolables: ¿cómo termina?
La serie muestra cómo un pueblo atrapado bajo la influencia de una secta revela sus secretos más oscuros y enfrenta un desenlace lleno de traiciones, ilusiones y decisiones irreversibles.
En el último episodio de Incontrolables parece que Alex Dempsey logra huir del pueblo junto a su hija tras descubrir que su esposa se ha convertido en la nueva líder de la secta, la misma que seguía ciegamente a Evelyn. Sin embargo, esta supuesta escapatoria resulta ser un engaño. En realidad, Dempsey jamás logra salir y, por el contrario, cae en manos de la propia jefa de Tall Pines, que lo secuestra al percibir que estaba perdiendo el control absoluto de la comunidad.
El veneno de las ranas y el poder de Evelyn
La líder decide envenenar al policía con la sustancia que usaba para manipular a los niños encerrados en la institución. Este veneno, extraído de ranas locales, en dosis mínimas provoca efectos psicodélicos que le permiten a Evelyn entrar en la mente de las personas y hacerles creer cualquier cosa, incluso que habían cometido asesinatos. De esta manera, mantiene a los habitantes bajo un control psicológico total.
La rebelión interna y el ataque contra Evelyn
El destino de Dempsey cambia gracias a la mano derecha de Collette, que había empezado a desconfiar de los métodos de su jefa. Con su ayuda, consigue escapar y enfrentar a Evelyn. En un momento decisivo, la ataca con la aguja y la inyecta repetidamente, administrándole una dosis mucho mayor de la "segura". Esto deja a Evelyn en un estado catatónico, aunque el desenlace es ambiguo: no queda claro si murió, si entró en coma o si el efecto podría revertirse.
La decisión de Alex y su familia
Tras este enfrentamiento, Dempsey regresa con su esposa, que está dando a luz. La escena es inquietante: casi todo el pueblo se reúne en la casa y se pasan al bebé de mano en mano como si fuera de todos. A pesar de la perturbación, Alex decide quedarse. Según explicó Martin a Tudum, "Alex se queda porque le importa más su fantasía de una familia nuclear y una vida heteronormativa que su brújula moral. Cree que puede cambiar las cosas. Pero creo que se debe principalmente a que ama a Laura".
Abbie y Leila, dos finales opuestos
El cierre ofrece distintos destinos para los demás personajes. Abbie consigue escapar del pueblo y, al no haber sido sometida a los mismos experimentos que el resto, tiene chances reales de hallar ayuda y construir un futuro distinto. En contraste, Leila elige permanecer en Tall Pines porque siente que su comunidad está allí y, al mismo tiempo, cree que alejándose de Abbie puede protegerla. Su desenlace no es perfecto, pero es el mejor que podía alcanzar dadas sus circunstancias.